Sal a la calle, de día y de noche, corre, salta, baila, grita… Toda la vida nos dicen que hay que madurar y asentar la cabeza, pero todos sabemos que siempre en cada uno de nosotros habrá un niño o una niña que solo quiere disfrutar. Porque la juventud es solo una actitud del alma, este diseño mancha las paredes de la madurez con pintura amarilla de libertad y rebeldía.